Las provincias habrían cerrado el Tercer Trimestre con superávit financiero que se agotaría en los últimos tres meses del año, dando como resultado un déficit financiero anual 23% superior al de 2013, pasando de $10.400 millones a $12.900 millones, en tanto que el resultado primario lo haría desde los $2.700 a los $3.300 millones. En este marco, con amortizaciones de deuda en $23.200 millones, las necesidades financieras ascenderían a $36.000 millones (+45% i.a.), equivalente al 0.7% del PIB estimado por E&R. En 2015, las necesidades se duplicarían si la Nación no programa la deuda que mantienen las provincias bajo el PFDP.